domingo, 14 de febrero de 2016

EL ARCA DE LA ALIANZA






El arca del testimonio
(Ex. 37.1–9)

 Éxo 25:10 Harán también un arca de madera de acacia, cuya longitud será de dos codos y medio, su anchura de codo y medio, y su altura de codo y medio.
Éxo 25:11 Y la cubrirás de oro puro por dentro y por fuera, y harás sobre ella una cornisa de oro alrededor.
Éxo 25:12 Fundirás para ella cuatro anillos de oro, que pondrás en sus cuatro esquinas; dos anillos a un lado de ella, y dos anillos al otro lado.
Éxo 25:13 Harás unas varas de madera de acacia, las cuales cubrirás de oro.
Éxo 25:14 Y meterás las varas por los anillos a los lados del arca, para llevar el arca con ellas.
Éxo 25:15 Las varas quedarán en los anillos del arca; no se quitarán de ella.
Éxo 25:16 Y pondrás en el arca el testimonio que yo te daré.
Éxo 25:17 Y harás un propiciatorio de oro fino, cuya longitud será de dos codos y medio, y su anchura de codo y medio.
Éxo 25:18 Harás también dos querubines de oro; labrados a martillo los harás en los dos extremos del propiciatorio.
Éxo 25:19 Harás, pues, un querubín en un extremo, y un querubín en el otro extremo; de una pieza con el propiciatorio harás los querubines en sus dos extremos.
Éxo 25:20 Y los querubines extenderán por encima las alas, cubriendo con sus alas el propiciatorio; sus rostros el uno enfrente del otro, mirando al propiciatorio los rostros de los querubines.
Éxo 25:21 Y pondrás el propiciatorio encima del arca, y en el arca pondrás el testimonio que yo te daré.
Éxo 25:22 Y de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel.



Estaba hecha de madera de acacia cubierta de oro y sus dimensiones eran de 115 cm. x 70 cm. x 70 cm. Estaba colocada en el lugar santísimo y contenía las tablas de la ley, aunque posteriormente se añadieron el maná y la vara de Aarón que reverdeció (Hebreos 9:4), de forma que en el arca estaba preservada la santidad de Dios (ley), su provisión misericordiosa (maná) y su soberanía electiva (vara).

Arca del pacto (Números 10:33) y arca del testimonio (Éxodo 25:22) son dos nombres con las que se le designa. La ley de Dios es su testimonio porque es su propia afirmación sobre su ser y propósito. También esa ley es su pacto, porque ella contiene los términos del mismo. Como la ley, reflejada en los diez mandamientos, estaba guardada en el arca es lógico que a ésta se le designe por los mismos nombres que a aquella.

Nuestro problema reside precisamente en que hemos transgredido esa ley y por lo tanto estamos bajo maldición, con todas las consecuencias que la misma conlleva: culpa, extrañamiento y condenación. La ira de Dios pende sobre nosotros con justicia a causa de nuestros pecados. Y por supuesto Dios no va a pasar por alto su ley, porque eso sería tanto como negarse a sí mismo. No es extraño que el lugar santísimo sea inaccesible para el pecador. Y en realidad es mejor que así sea, porque su entrada a ese lugar significaría su muerte segura.

El propiciatorio era la tapa de este Arca. Dos querubines se encontraban en sus extremos. Estos miraban hacia el propiciatorio: miraban la sangre que era derramada sobre él el día de la expiación. Estos querubines eran de una pieza con la tapa. Simbolizan la forma en la que Cristo aúna la misericordia y la justicia de Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario